Ovario: ¡Quistes, quistes y más quistes!

He visto muchas mujeres preocupadas, durante muchos años, por diagnósticos previos de quistes de ovario, a pesar de haber desaparecido espontáneamente o con tratamientos hormonales breves. He visto mujeres realizándose ecografías periódicamente de por vida, por un quiste que le diagnosticaron cuando tenía 18 años.

Frases dichas en la consulta o por el ecografista, a veces, simplemente para rellenar el silencio, como: "esto lo tendremos que controlar", "a ver si no crece", etc... Y mujeres con miedo a preguntar o a hacer preguntas que no sean respondidas o que tengan respuestas que no quieren oir. 

Mujeres que tras la palabra "quiste de ovario", visualizan un futuro con posibilidad de un crecimiento desmesurado o una persistencia del mismo o la aparición de uno nuevo en el mismo o en el otro ovario, o la conversión del quiste en cáncer. Tras cualquiera de estas posibilidades el miedo a tener que enfrentarse a la extirpación de uno o los dos ovarios. Y rodeando todos estos miedos, el temor a que esto tenga consecuencias dificultando o impidiendo el embarazo.

Sin embargo, nuestros ovarios producen quistes cada mes. Tras la regla uno de los óvulos en reserva, que hay en el ovario, empieza su crecimiento y esto comporta la formación de una bolsa con líquido que contiene el óvulo que se está desarrollando (quiste folicular). En el momento de la ovulación está bolsa de líquido, que tiene unos 20 mms de diámetro aproximadamente, se abre para desprenderse del óvulo ya maduro, que viajará por la trompa hasta el útero. Tras la ovulación el quiste folicular se transforma en el cuerpo amarillo. En algunas ocasiones, en el proceso de ruptura del quiste folicular, se produce una pequeña colección de sangre que se acumula en el cuerpo amarillo, dando lugar a los quistes hemorrágicos. Si no ha habido embarazo, este cuerpo amarillo ya no existe cuando aparece la nueva regla. Si ha habido embarazo este cuerpo amarillo crecerá durante los siguientes tres meses, alimentando la nueva vida, hasta que la placenta esté totalmente formada.

Todas las mujeres tenemos quistes funcionales durante la etapa vital en que tenemos reglas. ¡Está en nuestra naturaleza!

Trótula te quiere informar sobre la normalidad de los quistes funcionales de ovario:

• Si alguna vez, cuando te hacen una exploración te dicen que tienes un quiste de ovario, consiguen que te especifiquen si es líquido o sólido
• Los quistes líquidos casi siempre son funcionales, es decir son debidos al propio funcionamiento normal del ovario y aparecen en mujeres que tienen la regla. Durante la menopausia si se detecta algún quiste líquido suele ser la persistencia de un quiste funcional que se formó muchos años antes..
• El tamaño de estos quistes funcionales depende mucho del funcionamiento del ovario aquel mes. Todos los quistes inferiores a 50 mms pueden considerarse normales, sobretodo si la exploración se ha realizado alrededor de la ovulación ( día 14 de l ciclo en una mujer con ciclos de 28 días. 
• Es más frecuente encontrar estos quistes si la exploración se realiza en un momento en que tienes irregularidades menstruales. En la adolescencia o en la perimenopausia son más frecuentes porque el ovario suele funcionar distinto. Debido a que se producen niveles de hormonas irregulares, estos quistes funcionales pueden ser menores o mayores de lo normal. Puede producirse el quiste folicular sin que se produzca la ovulación y por lo tanto no se rompe, puede seguir creciendo y no formarse el cuerpo amarillo.
• En las mujeres que toman anticonceptivos hormonales combinados, dado que el nivel de hormonas es constante y no se produce esta ovulación es menos probable encontrar quistes funcionales. Algunos profesionales, ante un diagnóstico de quiste funcional dan anticonceptivos hormonales combinados unos tres meses. El porcentaje de desaparición de estos quistes funcionales es el mismo en mujeres que hacen este tratamiento, que en las mujeres que no lo hacen.
• En las mujeres que toman anticonceptivos hormonales con gestágenos, por su manera especial de funcionar, es normal encontrar quistes líquidos persistentes, habitualmente menores de 50 mms. No tienen ninguna importancia.
• Los quistes funcionales suelen reabsorverse con el tiempo y desaparecer.
• Los quistes funcionales nunca se convertirán en cáncer
• La presencia de quistes funcionales no tiene ninguna repercusión en las posibilidades de embarazo

TRÓTULA TE RECOMIENDA:

Evita hacerte ecografías ginecológicas de rutina, es decir si no notas ningún cambio en las reglas

Evita hacerte ecografías ginecológicas de rutina, especialmente si utilizas anticonceptivos con sólo gestágenos (pastillas, inyectable, implante, Dispositivo intrauterino Mirena)

Evita hacerte ecografías ginecológicas de rutina, especialmente si sólo tienes irregularidades menstruales o eres adolescente o estas en la etapa perimenopáusica (se esta´n yendo las reglas

Si te diagnostican un quiste funcional inferior a 40 mms no le des ninguna importancia

Si te diagnostican un quiste funcional superior a 40 mms, podría controlarse a los 3 meses y si ha disminuido o ha desaparecido, no le des ninguna importancia

Ante un diagnóstico de quiste funcional nunca permitas que te realicen marcadores tumorales de cáncer. No hay ninguna relación entre estos quistes y el cáncer. Estos marcadores tienen muchos falsos positivos en personas sanas (alterados aunque no haya ningún cáncer). Si te salen alterados lo vas a pasar muy mal y tendrás que hacerte un montón de pruebas, algunas con posibles efectos secundarios. Todas las guías de práctica clínica de expertos en prevención del cáncer, recomiendan dejar estas pruebas para el seguimiento de algunos cánceres después del tratamiento. Nunca los aconsejan para hacer diagnósticos de cáncer.