¿Porqué se quitan tantos ovarios y tan pocos testículos?

Los ovarios suelen ser minusvalorados por la profesión médica, y demasiadas veces, se quitan sin pensar que quitarlos puede tener más consecuencias negativas para la salud de las mujeres que dejarlos.  

Los ovarios y los testículos son unas glándulas que tienen dos funciones esenciales: producir óvulos o espermatozoides, para favorecer la reproducción de la especie humana y producir hormonas sexuales femeninas o masculinas, para que el cuerpo pueda desarrollar y mantener las características sexuales femeninas o masculinas (distribución del pelo y la grasa corporal, características de la piel,  la masa muscular y los genitales, desarrollo de las mamas, etc). Pero además las hormonas sexuales tienen efectos en las capacidades cognitivas y emocionales, en la función cardiovascular, en las características de los huesos, etc.

Las indicaciones médicas para quitar los testículos son los procesos infecciosos que han anulado su función, el cáncer de testículo y en algunos casos de cáncer de próstata y es dudosa su indicación en algunos casos de anomalías cromosómicas o intersexualidad. Nunca se extirpan testículos sanos y pocas veces se extirpan por tumores benignos.

La mayor parte de ovarios que se extirpan son ovarios sanos que se quitan en el curso de una operación por una patología benigna del útero. También se extirpan demasiados ovarios sanos en los que existe quistes funcionales, que desaparecerían espontáneamente. Cuando existen quistes orgánicos o tumores benignos del ovario, demasiadas veces se extirpa todo el ovario, en vez de limitarse a extirpar el tumor.

Trótula se pregunta porqué las mujeres permitimos que nos quiten los ovarios cuando los tenemos sanos

• La práctica de una histerectomía (extirpación del útero) por patología benigna, especialmente miomas, es una de las situaciones que condicionan una mayor probabilidad de que a una mujer le extirpen unos ovarios sanos. La probabilidad de mantener estos ovarios es:
• Del 30% en las mujeres de más de 60 años
• Del 25% en las mujeres entre 50 y 59 años
• Del 40% en las mujeres entre 45 y 49 años
• Del 62% en las mujeres entre 40 y 44 años
• Del 74% en las mujeres menores de 40 años
• Algunas de las razones médicas que se dan para quitar estos ovarios sanos son:
• No son necesarios si ya no hay deseo de embarazos en el futuro.
• La disminución del riesgo de padecer un cáncer de ovario en el futuro. La posibilidad de padecer un cáncer de ovario es de 4 en cada 10.000 mujeres. La única excepción sería en mujeres con un altísimo riesgo de padecer cáncer de ovario.
• Evitar la posibilidad de una nueva intervención por tumores en los ovarios. 
• La disminución del cáncer de mama. Esta disminución está controvertida en los estudios científicos.
• La mayor parte de tumoraciones benignas del ovario, que se solucionan quitando el ovario, se justifican para evitar la posibilidad de que exista una torsión del ovario, con pérdida del mismo. Los quistes de ovario de más de 5 cms. tienen más probabilidades de torsionarse (el ovario gira sobre su eje vascular, dejando de recibir sangre y condicionando un cuadro agudo de dolor, que requiere de tratamiento analgésico y si no mejora tratamiento quirúrgico). Del 3,5 al 11% de las mujeres con quistes de ovarios de más de 5 cms. pueden tener una torsión en el ovario. Ante una torsión del ovario, frecuentemente se procede a extirpar el ovario, aunque  del 88 al 100% de los casos, según los estudios, podrían resolverse detorsionando el ovario y extirpando sólo el quiste o el tumor benigno del ovario.
• La práctica de ecografías ginecológicas en mujeres sin ningún síntoma ha aumentado de manera dramática el número de mujeres con diagnósticos de quistes en el ovario, muchas de las cuales verán sus  ovarios sanos extirpados.
• La toma de anticonceptivos con gestágenos aumenta la posibilidad de quistes de ovarios funcionales sin ninguna repercusión para la salud, pero el desconocimiento de esta posibilidad, puede ocasionar que les quiten algún ovario.
• La extirpación de los dos ovarios sanos tiene muchas repercusiones para la salud:
• Si se realiza antes de la menopausia se provoca una menopausia aguda que puede producir:
• Importantes síntomas menopaúsicos: sofocaciones, cambios emocionales, dolores musculares y articulares, insomnio de duración variable
• Modificaciones de la respuesta sexual con una disminución del deseo y la respuesta sexual.
• Cambios en la elasticidad, secreción y vascularización de la vagina con sequedad vaginal y dolor en las relaciones sexuales con penetración.
• Cambios en la capacidad, elasticidad y funcionamiento del a vejiga que condicionará micciones frecuentes y incapacidad de retener la orina ante la sensación de ganas de orinar
• Aumento de la mortalidad por trombosis arterial (infartos de miocardio y embolias cerebrales)
• Aumento de la frecuencia de osteoporosis con fracturas vertebrales y fracturas del cuello del fémur
• Las hormonas femeninas son importante para mantener la capacidad cognitiva y su déficit anticipado se relaciona con una mayor posibilidad de demencia, síndrome de Alzheimer y enfermedad de Parkingson.
• Si se realiza tras la menopausia las repercusiones para la salud son menores. 
• El ovario en esta etapa ya no produce estrógenos ni gestágenos, aunque parece que hasta los 65 años produce una pequeña cantidad de hormonas masculinas, que se convierten en femeninas cuando se metabolizan en la grasa corporal y estas pequeñas cantidades de hormonas femeninas disminuyen la posibilidad de síntomas a corto y a largo plazo derivadas del déficit de hormonas. 
•  Mantener los ovarios antes de los 65 años parece fundamental para que todos los cambios debidos a la menopausia, que son los mencionados en el apartado anterior, sean minimizados.
• Incluso tras los 65 años la extirpación de los ovarios sanos se relaciona con un aumento de mortalidad global y especialmente la mortalidad por problemas cardiovasculares.

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Si tienes una intervención para quitarte el útero por una patología uterina, tengas la edad que tengas, pide que no te quiten los ovarios. Si finalmente te los quitan, verifica cuando te den los resultados de la anatomía patológica, que realmente no se trataba de ovarios sanos. Si eran sanos exige que el cirujano te dé una explicación.

La presencia de quistes de ovario son frecuentes cuando se hace una ecografía. No aceptes una intervención inmediatamente tras el diagnóstico. La mayor parte de ellas desaparecen espontáneamente en pocos meses. Vale la pena la espera.

Las tumoraciones benignas del ovario menores de 5 cms no deben operarse si no te dan síntomas que disminuyan tu calidad de vida.

Si tienes una tumoración benigna de ovario superior a 5 cms, valora si los síntomas que tienes y la posibilidad de torsión (3,5 al 11%), son una razón para operarte. Pide que sólo te quiten la tumoración ovárica, pero no te quiten el ovario.

Los ovarios son órganos esenciales para la salud de las mujeres y su extirpación sólo debiera tener lugar en situaciones muy comprometidas para su salud.